Bien podría ser un rasgo genético que se transmite inexplicablemente de padres a hijos a lo largo de los tiempos. O también una religión que se profesa hasta más allá del límite del entendimiento. Incluso podría ser una “enfermedad” de la cual no se tiene registro, ni remedio y mucho menos cura.
Sea cual fuere el origen sabemos que existe. Sabemos que está entre nosotros. Sabemos que no distingue edades, razas, ni creencias. Atraviesa territorios, cruza fronteras, y clases sociales. Nos hermana, nos hace sentir acompañados. Nos permite sentirnos en casa estemos donde estemos. Porque donde haya un “trapo marrón y blanco” siempre será nuestra casa…Donde haya una bandera habrá siempre alguien que nos contenga, un amigo con el que nos abracemos en la tristeza y hasta lloremos de alegría…en otras palabras un HERMANO.
Así lo entendieron los amigos del grupo de “Calamares del Interior” y decidieron hermanar el país con una bandera. Una bandera que ya salió de Mar del Plata, llegó a Necochea , pasará por Balcarce, Chascomús, Lezama, Saavedra, Junín, Lincoln, San Nicolás de los Arroyos y Ramallo en Buenos Aires, Urdinarrain, Concepción del Uruguay, Colón, Villa Elisa, Concordia, Villaguay, Crespo y Paraná en Entre Ríos, San Jerónimo Norte, San Lorenzo, Rosario y Firmat en Santa Fé, Córdoba Capital, Bialet Massé, Santa María de Punilla y Capilla del Monte en Córdoba , Añatuya en Santiago del Estero, Monteros en Tucumán, Salta capital, Catamarca capital, Rivadavia (San Juan), Godoy Cruz (Mendoza), Plaza Huincul, Cutral Co, ciudad Capital y Villa La Angostura en Neuquén, Bariloche (Río Negro), Epuyen y Trelew en Chubut, Viedma (Rio Negro) y concluirá su viaje en Coronel Suarez, guardando entre sus fibras un pedacito del corazón de cada uno de aquellos cientos de calamares que se animaron a formar parte de esta hermosa y envidiable experiencia y llevando consigo el polvo del camino de los miles de kilómetros recorridos.
Gracias Calamares del Interior por esta locura, gracias por unirnos a todos bajo LA BANDERA MAS GRANDE DEL MUNDO.
Texto: Marcelo Silva
DEPARTAMENTO DE PRENSA C.A. PLATENSE
