El siglo cumple sus primeros años anticipando la definición aporteñada después por Enrique Santos Discépolo: «problemático y febril». Concluyen guerras como las protagonizadas por Rusia y Japón pero suceden otras. Se separan Suecia y Noruega. Los motines estallan en Rusia, Francia obtiene Marruecos.
Y España deslumbra con sus genios artísticos: Unamuno, Picasso, Manuel de Falla. Argentina-próxima al centenario de la Revolución de Mayo-cuenta con una población de poco más de cinco millones de habitantes, de los cuales un millón vive en la Capital Federal. Es presidente el doctor Manuel Quintana. Se exporta por valor de 322 millones contra 205 millones de importación. Se siembran entre trigo, lino y maíz 12 millones de hectáreas. Se funda la Universidad de La Plata. Se instala el primer cine en Esmeralda al 300. Circulan 1.576 vehículos particulares, siendo el tranvía el transporte colectivo casi excluyente.
¿Y el fútbol? Los equipos ingleses que nos visitan reiteran sus goleadas a los incipientes locales. Ese año NottinghamForest convierte 13 goles a los británicos afincados aquí; nueve a la Liga Argentina; siete a Belgrano y seis más al más poderoso de ese tiempo: Alumni. Es el deporte que ha nacido aquí de la mano-por supuesto inglesa- de don Tomas Hoggs, que en 1867 es designado presidente del Buenos Aires Foot-Ball Club; pero es indudable que la influencia del escocés Alejandro Watson Hutton sería la decisiva.
Al fundar en 1884 el Buenos Aires English High School impulsa ese y otros deportes dando nacimiento al Alumni-el primer grande de nuestro fútbol-con la base de los siete hermanos Brown, todos argentinos. De la forma vertiginosa para la época en que el mismo se difundió lo dice como ejemplo esta información: en 1904 se juega el primer partido interprovincial entre Salta y Jujuy. Ganan los salteños 6-0, pese a haber cubierto los 96 kilómetros que separan a su capital de la vecina a pie. Quizás el premio haya sido el regreso en tren.
Y es en 1905 que nacen cuatro grandes instituciones: Independiente, el 1° de enero; Boca Juniors, el 3 de abril; nuestro Platense, el 25 de mayo y Estudiantes de La Plata, el 4 de agosto.
La fundación
Los ámbitos de la Recoleta carecían de la estructura parisina de hoy. Siempre recostada sobre la Iglesia del Pilar, construida en 1732, no tenía límites marcadamente divisorios con Retiro y el puerto. Los muchachos se reunían bajo la protección de los inolvidables faroles esquineros y particularmente en Posadas y Callao un grupo de humilde extracción social recibía del changador Antonio Meraggia el «dato» imperdible de una de las carreras a disputarse ese mes de mayo en el Hipódromo Nacional. El pingo, hijo de Saint Mirin, llevaba por nombre Gay Simón y pertenecía al stud Platense. Y como no suele ocurrir: ganó y les dejó -jugando 5 boletos-, con el suculento sport de $ 89 cada uno- la exorbitante suma de 445 pesos: los suficientes para equipos, pelota, inflador, movilidades, etc., dando fecha de nacimiento el 25 de mayo -en homenaje al Día de la Patria- al club que llevaría el nombre del stud salvador: PLATENSE, porque estaba radicado en La Plata.
Un grupo se escindió al tiempo y fundó otro club llamado Kimberley. Nacimos bajo el signo de desencuentros internos que serían bastante comunes en la vida del club. Aquel Kimberley, afincado en Villa Urquiza y con camiseta azul y verde, resolvió desafiliarse en 1916 y no volvió más, tras enfrentarse varios años con Platense en Primera División.
En 1905 el primer presidente de Platense fue JoséViviani e integraban la comisión, entre otros: los hermanos César, Julio y JoséPianarolli, Santos Aliverti, José Roggerone, Carlos Garbagnati, Roque Jaureguiberry, Leopoldo Lacoste y el citado Meraggia. La primera «sede» se estableció en Callao 2058 -domicilio de los Garbagnati-, aunque eran frecuentes las reuniones en la carbonería de Aliverti, en Posadas 1515. Sobre las casacas que distinguieron a Platense, los datos son contradictorios; pero aparentemente tras optar por los colores del stud (camisa colorada con puños y cuello negros y tresalamares negros, se pasó a las insignias del jockey que condujo a Gay Simon, haciendo de su chaquetilla blanca con lunares y gorra marrones la camiseta blanca con franja marrón, colores oficiales del club.
Llegaron así los primeros desafíos utilizando para jugar los terrenos de la entonces Plaza Japonesa (luego Parque Japonés), en especial con sus rivales de zona: Comercio y Argentino de Núñez. Los muchachos se esforzaban no solo por emparejar lo posible el campo, dotarlo de arcos, delimitar las líneas de juego, sino por tener la pava lista para el clásico té del entretiempo o las naranjas que eran el obsequio al final del partido. Los éxitos de esos primeros partidos los alentaron a inscribirse en torneos de ligas independientes, ganando los de la Liga Central, dirigida por EricoStanger y la Copa Wellington, siendo segundos en la Liga Eureka y en la Sportiva Nacional.
Para 1906, Platense compitió en la Liga Central, Segunda División sección B, junto al Argentino de Piñeyro, Banfield B, Independiente B, Comercio B, Gutemberg B, Highland Forest, Primero de Mayo y Mariano Moreno. Finalizó segundo en su sección. En abril de 1907, los futuros Calamares ganarían el tercer puesto en la Segunda División de la Liga Central, al imponerse por 4-3 sobre Los Cívicos.
Ya había que pensar en cancha propia, que incluyese la inefable casilla, imprescindible para lograr la afiliación a la Asociación Argentina de Football. Para ello fue decisivo que uno de los hermanos Garbagnati -Carlos, de unos 18 años entonces- fuera empleado municipal. Obtuvo la concesión precaria de un amplio predio sito en Manuela Pedraza y Blandengues (hoy Avenida del Libertador), terrenos de un bajo inundable con frecuencia que los obligaba a trabajo extra en cada partido (que era el de rellenarlo). De la conjunción de la tez oscura de alguno de sus integrantes y el color que adquirían con el barro que se formaba en la cancha, nació el mote de calamares (calamares en su tinta,porque en esas condiciones obtenían los mejores resultados), que se atribuye al periodista Antonio Palacio Zino.
Es allí donde pasan a tener decisiva influencia los hermanos Guassone en especial Germán, luego gran árbitro y presidente entre 1912 y 1913. Según refiere RaulMartinetti, socio número 1 en 1934, la famosa casilla se armó gracias a que siendo el padre de Guassoneconstructor de obras se resolvió expeditivamente cargar los materiales necesarios para su armado en chatas propiedad del señor Juan Colombo. Hubo que luchar con la severidad de las autoridades de la Asociación, en especial de su secretario Francisco Williams, hasta lograr al final la deseada afiliación, tras varios rechazos. Las tareas de ese tiempo tuvieron pilares fundamentales en el carpintero Domingo Fiorito; los hermanos Juan y Santiago Rossi, Martín Álvarez; Bartolomé Campi, Dámaso Scosseria, Pedro Gianolli y la donación personal de José Aranda, quien pagó de su bolsillo el costo de la inscripción. Tambien adhirió pecuniariamente el Dr.Carlos F. Melo, produciéndose entonces el ingreso de Abraham y Adán Pérez, Foico, Contratti, Pedro Martínez, Miguel Balmaceda, Berti, Colombo, Arturo Ansaldo, Timoteo Sinigaglia, Decatre, Buraschi, Vasallo, Lema y varios más. Varios de estos futuros cracks de Platense eran jugadores del Pretender, un equipo que hacía de local en el predio de Manuela Pedraza y Crámer, pero una década antes de nosotros.
Allí en Núñez tuvieron el apoyo fundamental de quienes formaban el Club Gloriosos Unidos: Magliano, Celli, Mazzini, Costa, Fraga, Pisa, Di Mare, y tres apellidos dobles: 105 hermanos Domingo V Colombino Santángelo, Juan y José Tettamanti y Alejandro y Pedro Cositorto, Los Gloriosos tenían su canchita en la calle Besares y Cabildo.
La primera cancha fue inaugurada el 25 de mayo de 1908, estaba ubicada en el cruce de Manuela Pedraza y Blandengues (la futura Libertador). El primer encuentro fue un empate en tres goles con el desaparecido club Salguero. Para 1909 se consigue la afiliación a la ArgentineFootballAssociation y el club se anota en la Copa Competencia para equipos de segunda o tercera categoría. El debut oficial (20/5/1909 ante Banco Nación) no es permitido porque la AFA resuelve declarar no apta a la cancha para partidos oficiales.
El campo de juego era lindero a la cancha del club Comercio, vecino además de las canchitas de Libertarios Unidos (luego llamado Sportivo del Norte y finalmente Colegiales) y también las de Defensores de Belgrano y Kimberley. Los decepcionados dirigentes resuelven anotar al club en la Liga Sportiva Nacional, donde Platense gana su zona y pierde la final contra Liberal Argentino, otro equipo que sería rival en Primera durante los años 20.
Finalmente se acepta la afiliación y Platense inicia su camino oficial eliminando a Olivos en la Copa Bullrich de Segunda División. A continuación empieza el torneo de ascenso y enfrenta por primera vez a Racing, San Fernando, Bernal y Estudiantes de La Plata, finalizando en la sexta posición, con 8 victorias, 5 empates y 9 derrotas. El 23 de octubre juegan en el Bajo, empatando en uno, Platense y Kimberley, con incidentes al finalizar el encuentro cuando se produce un gol de Kimberley que el juez no convalida. Y el 18 de setiembre Platense vence como local al desaparecido club Bernal por 4-3.
Al crearse la categoría Intermedia, Platense pasa a competir en la tercera categoría, donde actuaban 33 clubes divididos en tres secciones. El ya Calamar gana la zona B, con 32 puntos, al ganar 16 de los 18 partidos, pero pierde la semifinal ante Riachuelo por 2-1. Sin embargo, estos dos equipos más Olivos son ascendidos a la Intermedia.
Vuelto a la segunda división, Platense cumple una gran campaña y termina segundo del campeón, Ferro Carril Oeste, que le causa las dos únicas caídas en los 12 partidos del torneo. Detrás de Platense se ubicaron Boca Juniors (victoria 3-1 en la Boca y empate sin goles en el Bajo) seguidos por Estudiantil Porteño, Comercio, Olivos y Riachuelo.
Todos son ascendidos a la Primera División, cuando el único que había ganado el derecho en la cancha fue el campeón, Ferro Carril Oeste. La determinación la tomó la Asociación Argentina al crearse la Federación Argentina de Football (FAF) y alejarse varios clubes a la nueva entidad, dejando con pocos equipos la Primera A. A los siete equipos ascendidos se sumó a Banfield, ganador del torneo de tercera división y fue invitado Ferrocarril Sud. A título ilustrativo digamos que a la Federación emigraron Estudiantes de La Plata, Argentino de Quilmes, Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires, Kimberley, Independiente,Tigre, Hispano Argentino, Porteño y Atlanta.
1913: Debut en Primera División
Platense se enfrenta por primera vez con RiverPlate en la cancha de estos, entonces de Dársena Sud, de manera amistosa. Contrariando lo que la historia iba a determinar casi inexorablemente, Platense gana 3-1 el 16 de marzo, marcando Annaratone los tres goles y Ameal el de River.
Se produce el debut oficial el 13 de abril, con un rival de la envergadura de San Isidro, subcampeón del año anterior. Jugándose el partido en San Isidro a las 2.45 (según la nomenclatura horaria de la época), se indicaba que el tren que partía, de Retiro a la 1.30 llevaría a los espectadores. Esa tarde Platense formó con Abraham Pérez, Arturo Ansaldo y Ramón Ferreiro; Alfredo Perico, Ernesto Bellinzona y Genaro Barreto; Pedro Martínez, Jesús Moyano, Félix Annaratone, Adán Pérez e Isidro Cotero. Ganó San Isidro con un gol logrado por Pocock a los 16 minutos del primer tiempo. Siete días después sucede la presentación como local en Manuela Pedraza y Blandengues, con el triunfo inicial por un inusual 7-0 frente a Riachuelo, equipo este precursor de Sportivo Barracas, que lo absorbería ese mismo año.
Continuaron los exámenes ante los mejores perdiendo 4-0 contra Racing, a quien ya veremos como el indiscutible sucesor de Alumni, y venciendo 5 a 2 a Quilmes, último campeón, reforzado este año con cuatro de los hermanos Brown, entre ellos el mejor de todos ellos, Jorge, el zaguero. Asi llegamos a que luego de la fecha realizada el 28 de setiembre, en que Platense vence a Belgrano por 3 a 1, se realiza una reunión extraordinaria en la Asociación el 3 de octubre para considerar la definición del torneo, retrasado en su desarrollo por una gira cumplida en Chile, los partidos con los uruguayos y la visita de la Liga Paulista del Brasil.
Dada los distintos enfoques con que se interpreta la definición del certamen de este año, nos remitiremos a la información del diario «La Nación» del dia 4 de octubre: «Se resuelve dividir a los equipos asi, Liga 1: San Isidro, Racing y River; Liga 2: Belgrano, Boca Juniors, Platense y Quilmes; Liga 3: Estudiantil Porteño, Banfield, Estudiantes de La Plata y Comercio; y Liga 4: Ferro Carril Oeste, Olivos, Ferro Carril Sur y Riachuelo. En nuestra opinión esas eran las posiciones hasta el momento (mitad del certamen), siendo la decision fundamental de que los vencedores de las secciones (llamadas A, B y C) o la Liga 1 (RiverPlate, San Isidro y Racing) decidirían el ganador del torneo. «La Nación» califica a esta decisión como una verdadera injusticia y cita el caso de Boca Juniors que se opone «con energía al arreglo» arguyendo que en sus enfrentamientos con los integrantes de la primera sección había obtenido estos resultados: triunfos sobre Racing; empate y derrota por 1-0 con San Isidro e igual resultado con RiverPlate. La oposición de Belgrano es más terminante y se retira del certamen.
Lo destacable a nuestro juicio, y como pauta de tantas situaciones similares es el comentario del matutino, reforzado con visión futura por la envergadura de entonces y la adquirida posteriormente por Boca Juniors, dice así: «Ha sido siempre dura la lucha de los clubes pobres. Su progreso, expuesto al azar de múltiples circunstancias, fijo en el producto de entradas conseguidas en los matches con algún club importante la esperanza de equilibrar sus finanzas. Pero sancionada la disposición que comentamos se crea una situación incierta. Ascendidos por la escisión los clubes deberían quedar con todos sus derechos y garantías. Los teams modestos sentirán en lo que resta de la temporada las consecuencias de una medida que les quita oportunidades de jugar. Y en cuanto a los que les deja, puede decirse que a sus partidos no concurrirámás público que sus admiradores particulares. Los cuadros están en una división con ánimo de vencer a los más fuertes. El estímulo esta precisamente en la posibilidad constante de un triunfo que halaga y reporta; prestigio al vencedor.”
Continúa señalando el matutino que “desaparecido el interés noble, punto de la emulación, tanto valdría practicar solamente. La posición de un cuadro cambia de un año a otro. Atlanta encabezó el campeonato del año anterior y quedó luego en los últimos puestos, y Alumni hace dos años al revés. Es aventurado prejuzgar la posición final del campeonato. RiverPlate, Racing y San Isidro podrían quizás ser vencidos en todos los desquites y así Boca Juniors ganar el campeonato. Los últimos pueden ser los primeros. Así se estimula y alienta a los clubes». Estas palabras, que deben ser sopesadas en el tiempo en que fueron escritas (incluso por el lenguaje utilizado), no invalidan lo sustancial y más aun lo resalta, siendo el hoy poderoso Boca Juniors el pequeño club perjudicado de entonces. ¿Cuántas veces sobre los despachos de dirigentes no suficientemente informados y ubicados en su verdadera misión se legisló inclinando las decisiones hacia los poderosos del momento? Las innumerables supuestas reestructuraciones futuras avalan lo expresado.
Tras vencer Racing a River por 3-0 en el llamado desempate de la Zona A, se llega a la final en la que Racing se clasifica campeón al ganarle a San Isidro por 2 a 1. ¿Quéposición obtuvo Platense? El quinto lugar. Campeón Racing, segundo San Isidro, tercero River, cuarto Boca y quinto Platense, que reunió nueve triunfos, tres empates y seis caída, sumando 21 puntos.
La formación habitual de esta primera y brillante campaña fue con el arquero Abraham Pérez, Ansaldo y Ferreiro; Alfredo Perico, Bellinzona y Colombo; Pedro Martínez, Pisa, Annaratone, Adán Pérez y Cotero. Jugaron 18 futbolistas, siendo el goleador Isidro Cotero con 8 tantos. Algunas notas de esta temporada inaugural nos dicen, por ejemplo, que Platense perdió sus dos partidos contra River y Racing. En cambio, jugó por única vez en la historia contra Ferrocarril Sud, equipo invitado al torneo, al que superó por 5-4 como local.
El capitán calamar es el zaguero Arturo Ansaldo. Tienen su importancia los torneos de Copa Competencia y Copa de Honor, que se realizan por eliminación, jugándose las finales con el campeón uruguayo. Platense es eliminado del primer torneo por Estudiantil Porteño, que lo vence por 3 a 2. En la Copa de Honor, Platense 5 Provincial de Rosario 0; entidad a la que nos uniria una estrecha amistad.Luego se perdió ante San Isidro (2-1).La Segunda división formaba con: Lema, Ranchieri y Magliano; Regani, Germán Guassone (presidente del Club) y Álvarez; Verte, Balmaceda, Sinigaglia, Rossi y Gianoli.
1914: Por primera vez en una final
Con un peculiar torneo amistoso se inicia la temporada. En su cancha de Palermo, Estudiantes de Buenos Aires organiza un certamen reducido por eliminación, disputándose cada partido en dos periodos de 20 minutos cada uno y solo 6 jugadores por bando en cancha reducida. Lo que hoy llamamos Papi-Futbol. Platense forma con Abraham Pérez, Ansaldo, Martínez, Fraga, Adán Pérez y Balmaceda. Empata 1 a 1 con Estudiantil Porteño, pero es declarado ganador por marcar el primer tanto. En la segunda rueda le ocurre lo mismo con San Isidro, pasando así a la semifinal donde vence al recién incorporado Huracán por 2-1, para perder la final con Racing 3-0.
El campeonato oficial comienza el 29 de marzo y al igual que el año anterior contra San Isidro, pero esta vez acompañado por un celebrado triunfo por 2 a 0. La campaña es solo discreta: lo golea ell ya excepcional Racing (nuevamente campeón) por 7 a 1 y tras solo 4 triunfos contra 6 derrotas y dos empates, comparte el séptimo puesto con Quilmes, San Isidro y Estudiantil Porteño. Evitando los problemas del año anterior, la última fecha se juega el 18 de octubre, en la que Platense empata en la cancha de Huracán sin goles. El Globo tenía su campo en el cruce de Avenida Chiclana y la calle Alagón, a cinco cuadras del futuro Gasómetro.
En la segunda temporada en Primera se incorporan jóvenes de inferiores de los que se destacarán Tomas Sinigaglia y Miguel Balmaceda, este último ya goleador del año con 5: Sigue dando que hacer el terreno del Bajo Núñez: el partido con Boca Juniors del 24 de mayo se juega pese a la lluvia previa. La pelota es definida como «una masa viscosa y pesada». Y con Comercio se juego sobre «un denso barro». Enfrentamiento con Racing por la Copa Competencia; siendo eliminados tras gran actuación. Recién a los 44 minutos del segundo tiempo Marcovecchio marca el 2-1. Se jugó en Núñez.
Llegan al país los profesionales del Exeter City. Para enfrentarlos, el arquero Abraham Pérez es designado suplente de Carlos Isola, de RiverPlate. Eran épocas de jueces de línea designados por cada equipo: el nuestro, que actuó contra Ferro Carril Oeste, tuvo que ser retirado por el referee por la «actitud agresiva del público visitante». Y eso que ganamos 4 a 0. En aquel segundo torneo en Primera, Platense finalizó séptimo entre trece, con poco para destacar. El cuadro invitado, Ferrocarril Sud, jugó siete partidos pero decidió desafiliarse y no volvió más.
1915: Excelente campaña
Tras su fracaso institucional, la efímera Federación Argentina de Football se disuelve y sus clubes regresan a la entidad madre, la Asociación Argentina. Los que jugaban en Primera de la FAF son incorporados a la misma categoría y entonces la divisional pasa de 13 a 25 clubes. Entre ellos van a comenzar a medirse con Platense los cuadros de Independiente, Tigre, Defensores de Belgrano, Argentino de Quilmes y también San Lorenzo, que había ganado su ascenso.
Justamente el cuadro de Boedo todavía no tenía cancha propia, así que hizo de local en el campo de Ferro. San Lorenzo debutaría oficialmente en Manuela Pedraza y Blandengues, donde un Platense encendido lo recibiría el 4 de abril con una paliza: 5-1, con dos goles de Sinigaglia, más otros de Annaratone, Juan Pisa y Santiago Careta.
Enorme campaña alcanzando el quinto puesto, detrás del campeón Racing, el vice San Isidro, RiverPlate y el sorprendente Porteño, que jugaba como local en los bosques de Palermo. Ese año, Platense se hizo fuerte en su pequeña cancha: allí ganó diez partidos, empató uno y perdió solamente con San Isidro. Entre las victorias, vale la pena destacar el 4-1 a Independiente, con tres goles de Emilio Berti, defensor de fortísimo disparo. También hubo triunfos ante Boca por 2-1 y un celebrado 1-0 frente a Porteño.Finalmente se obtuvo un decoroso sexto puesto sobre 25 participantes, con 14 triunfos, 4 empates y 6 derrotas. Se incorporan nombres que cumplirían una extensa y exitosa trayectoria, como Berti, Zaccheo, Felisari y Santángelo.
Los hermanos Pisa fueron los goleadores del año con 6 tantos cada uno al igual que Berti, pero destaquemos que este zaguero ejecutaba los penales. Justamente Francisco, que había debutado contra Quilmes en 1913, se referiría años después a la eficacia que alcanzaban en su juego con Balmaceda y Sinigaglia, recordando con amargura que fueron expulsados del Club al finalizar este torneo por faltar a un partido. Ni se soñaba con planteos económicos o de otro tipo, pero la disciplina que ya imponía el presidente Archibaldo Goodfellow (1914-1918) los hizo emigrar a Estudiantil Porteño. Tampoco este año hubo éxitos en los torneos paralelos: eliminados por San Isidro (3 a 1) en la Copa de Honor y por RiverPlate (2-0) en la Copa Competencia.
1916: Lo mejor en primera división: Subcampeones
Los socios y simpatizantes de Platense querían agasajar a sus jugadores que intervendrían en el torneo superior. Y lo hicieron con un picnic realizado el domingo 6 de febrero de 1916 y, como rezaba la invitación, «a orillas del Rio de la Plata» (premoniciones) en Vicente López. Quienes quisieran participar estaban convocados entre las 7 y las 9 de la mañana en la estación Vicente López, provistos por supuesto de «comida y cubiertos».
El comienzo del torneo fue espectacular para Platense, manteniéndose invicto durante ocho jornadas -tras perder el match inicial con Porteño-, incluyendo un triunfo sobre River por 1-0. Luego de este partido la tabla era encabezada por Racing con 22 puntos en 12 partidos, seguido de San Lorenzo con 19 en 16 juegos, Estudiantil Porteño con 18 en 14 y Platense tenía 14 puntos pero con solo nueve partidos. San Isidro quebró la racha al vencernos 2-1, pero una nueva serie invicta de cinco partidos ubicó a Platense en el segundo puesto con 23 puntos, a 5 de Racing, aunque con un match menos.
Un traspié inesperado con el modesto Columbian en su cancha de Vélez Sarsfield e Iriarte concluyó con toda esperanza de alcanzar la punta. El año no terminaría sin la hazaña esperada: vencer al monopolista Racing. Fue en Núnez, el 5 de noviembre, formando con Pérez, Ansaldo y Berti; Santángelo, Zaccheo y AlbertoFelisari; Balmaceda, Fraga, Sinigaglia, Luis Felisari y Amores. El único gol -el del triunfo- lo marco Fraga a los 35 minutos del segundo tiempo, al tomar un córner de LuisFelisari. Los festejos fueron ruidosos y extensos. Así se llegó al final del certamen a cuatro puntos de Racing, en el logro de un segundo puesto no reiterado hasta el presente en primera división. La campaña se cumplió con un reducido plantel de 14 jugadores. A los 11 citados contra Racing hay que agregar a Celli, Adán Pérez, Magliano y Ángel García. El goleador fue Fraga, con 7 tantos.
En la Copa de Honor hubo triunfo sobre RiverPlate en la Dársena por con gol de Amores sobre la hora (también autor del gol en el match del campeonato). Se superó la siguiente ronda al no presentarse Quilmes, para llegar al enfrentamiento con Boca Juniors, que resultó muy particular. Un primer partido terminó 1-1, pese a dos tiempos suplementarios. El segundo en Núñez tuvo idéntico trámite y resultado, hasta que jugando en cancha de Estudiantes, vence Boca Juniors por 1 a 0. Por la Copa Competencia, Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires lo elimina por 1-0.
Había que dejar la cancha de Blandengues. Era imperativo hacerlo, mezcla de las mencionadas condiciones del terreno y de la sucesión de éxitos deportivos que hacían necesario un campo más amplio, mejor ubicado y con mayores comodidades para el público, cada vez más numeroso.
1917: Manuela Pedraza y Crámer (62 años antes)
Figura pionera de esta mudanza histórica fue el mencionado presidente Goodfellow, que llevó adelante sus planes pese a algunas críticas que entendían a su conducción como demasiado personal. Conto con la colaboración estrecha de Gregorio Callichio, Carlos García, Casto Pérez y Martín Álvarez, entre otros. La fracción en el entonces casi desolado contorno barrial de Manuela Pedraza y Crámer, fue arrendada por su propietario, el Dr. Carlos Delcasse al Club con las garantías personales del presidente y del señor Salvador Anbouxiec. Los trabajos para dejar la cancha en condiciones hicieron que los nueve primeros partidos los jugara Platense de visitante, con resultados que no guardaban ninguna relación con la excelente campaña anterior.
Y así llegó el 9 de julio, en que se procedió a la inauguración oficial en una jornada donde jugaron como preliminar un combinado de inferiores de Platense con Porteños de Zárate, ganando el primero por 5-0, para comenzar a las 14.30 horas el match amistoso con Provincial de Rosario. La formación fue: Abraham Pérez, Ansaldo y Berti; Dimari, Zaccheo y Santángelo; AlbertoFelisari, Fraga, Bernia, Balmaceda y Sinigaglia. Gano Platense 1 a 0, con gol de Sinigaglia a los 26 minutos del segundo tiempo. El match fue dirigido por Juan Barbera, que había renunciado para actuar como árbitro oficial a raíz de la agresión sufrida en Avellaneda en el partido Racing – Sportivo Barracas. La fiesta tuvo la para entonces insólita presencia de público femenino y «La Nación» dijo que «la nueva cancha reúne las condiciones requeridas por el grado de adelanto y organización de los equipos del Club. Amplia y bien nivelada cancha. Cómodas dependencias, con varias secciones de baños. Dos canchas de paleta, quedando terreno disponible».
El primer partido de campeonato en el nuevo escenario se juega el 22 de julio con Porteño, terminando 0-0. Fue otra premonición: el primer partido en Vicente López se jugaría exactamente 62 años después: el 22 de julio de 1979; concluyendo con el mismo resultado). De allí en más la campaña fue mejorando levemente para llegar a un escaso decimoquinto puesto sobre 21 participantes, en torneo que por supuesto ganó Racing. El plantel no tuvo prácticamente modificaciones, siendo el goleador Balmaceda con 6 tantos. Se enoja Ansaldo en cancha de Ferro Carril Oeste el 29 de abril al ordenar el juez Carlos Más la disputa del partido pese a la lluvia caída. Fue el único partido iniciado en la jornada, pues se suspendió a los 40 minutos. Pero Ansaldo pidió y obtuvo que su protesta constara por escrito. Al jugar con Boca Juniors, en su cancha de Ministro Brin y Senguel, nuestro ex puntero Amores empata sobre la hora jugando para los locales.
El primer gol oficial en la nueva cancha lo marca Miguel Balmaceda a los 15 minutos del primer tiempo, del partido ganado a San Isidro por 2 a 0. El primer anuncio de una nueva era futbolística en la historia del Club: en un equipo de inferiores, que vence por 4 a 1 a Racing, y obtiene la sección de la Copa Competencia de su categoría, aparecen dos goleadores que dirían todo con el transcurso del tiempo: Antonio Duarte y Ricardo Cracco.
De la flojedad de la campaña baste consignar que recién al empatar con Estudiantes de La Plata 2 a 2, el 12 de noviembre, Platense evita descender a Intermedia. Aparece así por primera vez en el Club la palabra «descenso», base de angustias distintivas a través de los años. Claro que este hecho resultó siempre en nuestro futbol una especie de tragedia deportiva-institucional, no ya por la pérdida de la categoría sino por las tremendas dificultades que implico reconquistarla, con su secuela de problemas económicos y societarios de todo tipo. Entendemos que esto solo desaparecerá cuando el juego de ascensos y descensos sea múltiple y sin privilegios.
1918: Mitad de tabla
Platense inicia su actuación del año en cancha de Sportivo Barracas. Allí debuta como arquero una figura que se convertirá con el tiempo en una historia propia dentro del Club: Alejandro Cositorto (Chingolo) . Fue una temporada solo discreta-rondando la mitad de la tabla- con algunos resultados contradictorios, como el triunfo sobre San Isidro en cancha de estos y cuando ocupaban el segundo puesto, por 2 a 1 o la derrota en Quilmes contra Argentino de Quilmes por 1 a 0 (primer triunfo de estos en la temporada en la que finalizarían últimos con solo 7 puntos). Posición final: decimosegundo sobre veinte clubes. Equipo: Cositorio; Ansaldo (a veces reemplazado con otro nombre luego consular: Juan Mazzini) y Berti; A. Santángelo,Zaccheo y A. Felisari, S. Santángelo, Balmaceda, Sinigaglia, A. Perez y Aguilar Pinedo. Prolifera la intemperancia y no solo en el entonces bravío Núñez. Así contra Columbian, al anular un gol a Sinigaglia, hay invasión de público intentando agredir al juez. Pero en el Parque Chacabuco, donde juega Atlanta de local, los parciales locales -que habían perdido por 1 a 0- consuman su ataque.
El match con San Isidro fue prodigo en incidentes y Matozzi de Estudiantil Porteño abandona la cancha disconforme con la actuación del juez. La habitualidad de los mismos problemas tendría decisiva influencia en el nuevo cisma a producirse al año siguiente. La fecha del 23 de junio es suspendida por un tiempo insólito: el día anterior había nevado en Buenos Aires.
Los scores no eran tan abundantes en goles como se presumía. Este año Platense marca solo 14 goles, pero su valla cae en 22 oportunidades. Teniendo en cuenta los 4 goles de Racing (capítulo aparte) nos encontramos con un escaso gol por partido. El arquero de Tigre, Magistretti, evita la derrota de su equipo al detener en el segundo tiempo sendos penales a Berti y Balmaceda. Termino 0 a 0. Y hablando de arqueros, esa leyenda boquense llamada Américo Tesorieri, exhibe su esmirriada estampa, su gorra y su clase en Núñez el 19 de mayo. Gano Boca Juniors 1 a 0. Los torneos paralelos otorgan significativos triunfos hasta su eliminación. Por ejemplo: el 2 a 1 contra Sportivo Barracas (quinto en el certamen principal), en su primera derrota del año; o el 2 a 1 contra Estudiantes de La Plata.
1919: Nuevo cisma
El certamen de este año se inició bajo apariencias normales el 16 de marzo. Platense pierde con RiverPlate 1 a 0, triunfa sobre Gimnasia y Esgrima por 2-0, pero ya se va delineando el conflicto que determinaría su suspensión. Varios clubes (entre ellos Platense), que solían reunirse en los salones de «La Prensa», analizan lo que para ellos es el caótico desarrollo de los campeonatos. Se menciona a los jueces sin autoridad, la brusquedad de los jugadores y hasta la incomprensible renuncia de estos por motivos «fútiles» a integrar la Selección Nacional.
Se piden varias medidas que no son aceptadas por la Asociación Argentina, que al fin desafilia a Racing, RiverPlate, Estudiantes de La Plata, Platense y otros, los que resuelven formar la llamada Asociación Amateurs. Como esta escisión dura hasta 1927 creemos oportuno transcribir, quiénes quedaron en una y otra entidad.
En la Asociación Argentina continuaron Boca Juniors, Estudiantes de La Plata, Huracán, Sportivo Almagro, Eureka y Porteño. En la flamante Asociación Amateurs lo hicieron Racing, Vélez Sarsfield (recién ascendido), RiverPlate, San Lorenzo Gimnasia y Esgrima La Plata, Independiente Platense, Atlanta, Defensores de Belgrano, Quilmes, Sportivo Barracas, Estudiantil Porteño, Tigre, San Isidro y Estudiantes de Buenos Aires entre los más importantes.
Se resolvió en la Amateurs jugar un campeonato de una sola rueda, que comenzó el 28 de setiembre con 14 equipos. Platense cumple otra solo discreta campaña quedando en la mitad de la tabla. Al plantel -sin mayores variantes-se incorpora el luego famoso puntero izquierdo Manuel Pardal. Hasta el momento de paralizar el torneo, sin división de entidades, Platense había jugado 8 partidos con 2 triunfos, 1 empate y 5 derrotas.
1920: Aceptable séptimo puesto
Jugándose partidos y revanchas entre 19 participantes hubo futbol desde el 1 de abril hasta fines de diciembre. Culmina este año la excepcional serie de Racing, con siete campeonatos consecutivos; RiverPlate lo relega al segundo puesto. De cualquier modo y teniendo en cuenta su intacto poderío, que se demostraría al año siguiente, cabe destacar el triunfo de Platense obtenido el 11 de noviembre por 1 a 0 con gol de Julio Lolato. El séptimo puesto, con 16 triunfos, 5 empates y 11 derrotas es meritorio. Cuando repasamos números vemos que a los nombres tradicionales (por ejemplo la línea media de Santangelo, Zaccheo y Felisari; Mazzini; Berti; Balmaceda) se agregan los de Tetamantti, LolatoGoin y Rivet. Justamente, los goleadores del año fueron un incipiente veterano como Balmaceda y otro que surgía, Lolato-ambos con 12 tantos.
Pero en materia de valores-y de acuerdo a lo anticipado en 1917-debemos destacar un hecho circunstancial en el momento, luego histórico: ya finalizando el torneo, el miércoles 8 de diciembre Platense visita a Estudiantes de Buenos Aires en su cancha de Palermo. No interesa el 2-1 en contra sino que el mismo día debutan Cracco y Duarte, figuras fundamentales de un ciclo extraordinario para el Club, como veremos avanzando un poco más en el tiempo. Un clásico de barrio que comienza a apasionar: Platense-Defensores de Belgrano. Cancha a pleno el 11 de abril en Defensores. Gana Platense 3 a 1. Hubo un breve inicio favorable: al terminar la sexta fecha era puntero con Atlanta. Al enfrentarse en la undécima fecha entre sí gana Atlanta por 1 a 0. Varios jugadores de Platense no pudieron compilar el jueves laboral en que se disputo el partido con sus respectivos trabajos. En el partido con Racing de la primera rueda en Avellaneda, «La Nación» destaca el arbitraje parcial del juez Planes, que ignora un claro penal de Barreto a Rivet y una mano muy visible de Riscitelli. Copa Competencia: Barracas Central 1 – Platense 0.
1921: Grave conflicto interno
El año de 1921 es el que marca las más serias dificultades internas del Club, que recién tendrían reiteración medio siglo después. Veamos que dice «La Nación» del 17 de abril al respecto: «Un grave conflicto interno amenaza al Club Atlético Platense. Los socios divididos en dos bandos, con tendencia opuesta, realizaron el jueves 14 una asamblea extraordinaria en la que se discutieron serios asuntos de la institución. Al triunfar una de las tendencias y al integrarse las autoridades, entraron a formar parte de la Comisión Directiva varios socios que se caracterizaron por sus ataques a la dirigencia saliente, a quienes se responsabilizó de diversos hechos. Triunfante la tendencia opuesta a la comisión saliente, los jugadores de Primera se solidarizaron con esta última y para demostrar su protestas amenazan con no jugar contra Vélez Sarsfield».
En realidad los titulares no se presentaron en esa segunda fecha del torneo y se conformó un equipo de emergencia que perdió por 3-0. Para la tercera jornada vuelven los titulares ante la promesa -según ella– de la CD de renunciar y ganan a Independiente por 2-0. Pero la comisión no renuncia y los cracks vuelven a estar ausentes contra Sportivo Almagro (0-3) y con San Lorenzo (partido en el que los jóvenes de inferiores cumplen gran labor, pues son derrotados 2-1 con gol marcado a los 38 minutos del segundo tiempo ante un equipo que estaba segundo en la tabla).
Solucionado el pleito, vuelven definitivamente los titulares ante Defensores de Belgrano el 15 de mayo, terminando 0-0. Pero lo realmente doloroso y lamentable fue que el grupo desplazado acudió ante la Justicia con el objeto de conservar el nombre y los colores del Club. Logra su afiliación a la Asociación Argentina, en tanto la habitual formación permanece en la Amateurs utilizando la cancha de Manuela Pedraza.
Veamos ahora el relato doméstico de la cuestión. Para las elecciones internas se forma una lista encabezada por el Dr. Resio de quien se dice asocia poco antes a un grupo relativamente importante que-sin la exigencia de antigüedad para votar- inclina el resultado a su favor. Archibaldo Goodfellow, su oponente, impugna.
Se suceden los enfrentamientos, hasta que los derrotados por 90 votos a 85 encomiendan la tarea de deposición de los elegidos (no sabemos el método utilizado) a un conjunto de socios encabezados por Juan Ibarra, Raúl Martinetti y Pedro Cositorto. Obtenido el desplazamiento del Dr. Resio, queda la división marcada que hace a la existencia de dos Platense en cada una de las asociaciones. Por supuesto que estos acontecimientos influyeron en la actuación del año, aunque la casi totalidad de los titulares quedaron en la representación oficial. Quizás la ausencia más sentida fuera la de Lolato. De cualquier forma, yaCracco y Duarte, sumados Pardal y algunas actuaciones del zaguero ex Boca, Roque Cortella y el puntero derecho Jorge León, permitieron un buen octavo puesto sobre veinte equipos, retornando Racing a ser campeón.
Así fueron sus resultados con los cuatro primeros: Racing (1-1 y 0-1), RiverPlate(2-0 y 0-2), Independiente(2-0 y 0-0) y Gimnasia y Esgrima de La Plata(1-1 y 0-0). El equipo habitual fue: Cositorto, Mazzini y Berti; Santangelo, Tetamanti y Felisari; Cracco, Duarte, Goin, Balmaceda y Pardal. El goleador fue Emilio Goin con 19 tantos en una delantera que marcó 63 goles, la cuarta más efectiva después de Racing, River y Gimnasia.
Desde su retorno con Defensores de Belgrano, los titulares permanecieron sin perder nueve fechas seguidas. El primer gol marcado por Antonio Duarte ante Quilmes en su cancha, -después de gambetear a cuatro adversarios- mereció el aplauso unánime de las tribunas. El futbol va ganando pueblo. El match con Racing en Manuela Pedraza debe ser interrumpido dos veces por la invasión de público, que no cabía en las gradas. El penúltimo partido con Gimnasia y Esgrima La Plata se jugó en Núñez, el 25 de diciembre. Futbol, pan dulce y sidra.
Mientras tanto, el Platense de la Asociación Argentina debutó el 17 de julio contra Boca Juniors, campeón del año anterior, obteniendo un gran empate en un gol, marcado por Ruiz. Como no tenía cancha propia, hacía de local en Sportivo Villa Urquiza habitualmente o en Sportivo Palermo.
1922: Mano a mano por el título
Suele ocurrir que la clasificación final no refleje la campaña de un equipo en sus verdaderos méritos. Y este de 1922 es un caso típico. Platense realiza -como veremos- una labor excepcional, pero algunos resultados finales de tan extenso torneo (40 fechas) lo relegaron al quinto puesto. Fue así que comenzando con un empate a cero con el luego campeón Independiente (ya con su famosa ala izquierda de Manuel Seoane y Raymundo Orsi), completa una serie de 12 fechas invicto (9 triunfos y 3 empates) que lo elevan al primer puesto con 21 puntos, seguido por Independiente con 20 y Banfield con 19.
En ese camino cayeron por ejemplo San Lorenzo en su cancha por 4-1 y Gimnasia por 4-0. La primera derrota llega con Racing en Avellaneda por 1-0. Pero ni este traspié ni el que sería habitual contra River (2-0) le impiden que luego del partido inicial de la segunda rueda donde vence a Independiente por 2 a 1 se ubique con 30 puntos a uno de su vencido y a dos de Banfield, puntero aunque con un partido más.
Debido a la extensión del torneo, se lo suspende hasta el 4 de marzo de 1923 con 28 fechas jugadas y estas posiciones: San Lorenzo y RiverPlate, 42 puntos; Platense e Independiente, 41.La reanudación no aporta los mismos resultados que el año anterior y sobre todo dos derrotas imprevistas y consecutivas contra Estudiantil Porteño y Vélez Sarsfield, lo van relegando en la lucha por el título, para finalizar en el citado quinto puesto. Muy remarcable aun si tenemos en cuenta que el campeón (Independiente) logró 65 puntos sobre 80 posibles y sus escoltas (RiverPlate y San Lorenzo) 61 y 60, respectivamente.
El equipo más usual fue: Cositorto, Cortella y Berti; Santangelo (o Dimari), Mazzini y Felisari; León, Cracco, Duarte, Benítez y Pardal. En el partido de la segunda fecha contra San Isidro se integra por primera vez la delantera antes citada, precursora con el cambio de Bissio por Fermín Benítez de la que sería leyenda en la historia del Club. Antonio Duarte es el goleador con 22 tantos remarcando la crónica que varios de ellos son obtenidos con golpe de cabeza-aunque el que otorga la victoria contra Estudiantes por 1 a 0 fue obtenido, según «La Prensa», con la mano.
Aumenta considerablemente el número de espectadores. Para el partido en Núñez con Independiente se agotan las entradas una hora antes de comenzar el match. Y hasta los funcionarios comienzan a hacerse presentes: el gobernador José Luis Cantilo observa en Avellaneda el partido Racing y Platense.
Cositorto juegas las 40 fechas. En Lanús, estando el partido 3-2, detiene un penal. La crónica destaca una labor excepcional: la del arquero Kiessel de Ferro Carril Oeste, que solo es batido a los 35 minutos del segundo tiempo con un penal ejecutado por Cracco. Pese a las mejores intenciones, los incidentes de aquellos tiempos siguieron aportando su cuota: algunos entre jugadores (con Sportivo Almagro -luego Almagro- entre Adet, Recanatini y Cracco); otros con el linesman, al que pretenden agredir Benítez, PardaL y Felisari en cancha de San Lorenzo contra Atlanta; algunos más serios, como la herida de arma cortante en la oreja derecha sufrida por Felisari en la cancha de Estudiantil Porteño en Campichuelo y Gaona, Parque Centenario, hasta las tragicómicas: después del partido con Barracas Central, en su cancha de Olavarría y Labardén, el juez es agredido por los parciales locales hasta que «pudo huir en un tranvía bajo una guerrilla de piedras», según consignó la crónica.
EI llamado Platense nuevo de la Asociación Argentina termina último con 9 puntos. Suele utilizar la cancha del Club Urquiza, en Mendoza y Freyre. Allí, por ejemplo, derrota a San Fernando el 6 de mayo por 1 a 0 con gol de Marchiessi. Formando con Franzino, Castillón y Paternoster; Marchiessi, Zaccheo y Arganaraz; Sacco, José García, Vaccaro, Lolato y Frumento. Al torneo principal de la asociación -liderada por Boca Juniors y Huracán- se van incorporando Argentinos Juniors, Nueva Chicago, SportivoDock Sud, AllBoys, Temperley y más adelante, Chacarita Juniors.
Un apunte personal, que muestra como no se enfrentan –por el contrario se unen-cultura y pueblo. El talentoso escritor argentino Bernardo Verbitsky -que tanta influencia personal tendría en los primeros escarceos literarios del relator de esta crónica-dice en su novela «Hermana y sombra», premiada por sus colegas como la mejor de 1978: «Pero nuestra lealtad al propio barrio nos convertía en inevitables adeptos de Vélez Sarsfield, entonces modesto club que tomaba su denominación del nuevo nombre del barrio de Floresta, al que se volvió muchos años más tarde. La cancha de Vélez situada entre los baldíos de pasto de Villa Luro tenía una modesta tribuna de tablones de madera y estaba rodeada de un alambrado desde el cual, sin pagar la entrada, podía verse los partidos, tocándonos asistir a su resonante victoria por 2 a O sobre Platense, cuando este club inesperadamente ocupaba el primer lugar a esa altura del campeonato».
1923: Solo el triunfo ante Racing
Debido a la demora en la finalización del campeonato de 1922, el de este año recién comenzó el 22 de julio, previéndose una sola rueda. La actuación fue apenas discreta, manteniéndose siempre por el medio de la tabla. Se pudo avanzar algunos puestos más, pero la Comisión Directiva resuelve dar por terminada la temporada oficial antes del match con Banfield previsto para el 30 de diciembre y faltando ése y dos partidos más. Solo cabe destacar el triunfo ante Racing por 3-1, que fue cuarto en el torneo ganado por San Lorenzo.
El éxito se produjo en Núñez por 3 a 1 con goles decisivos marcados por León y Cracco a los 38 y 39 minutos del segundo tiempo. No hubo cambios en el equipo y el goleador fue Cracco con 5 tantos. Mapelli, entonces arquero de Defensores de Belgrano, que luego pasaría a Platense, realiza una hazaña aunque parcial: detenerle un penal al potente shot de Cracco; hubo rebote y gol. Manuel Pardal estuvo en Montevideo y fue suplente de Orsi ante Uruguay con la Selección.
Platense nuevo en la Asociación Argentina ocupa el decimotercer puesto sobre 21 equipos. Política y futbol. Historia tantas veces reiterada: el Concejo Deliberante de la Capital Federal «exige» la fusión de las dos ligas. El argumento: eximirlas del pago del impuesto de alumbrado, barrido y limpieza. El partido del 18 de noviembre con Estudiantes en Núñez tiene sus notas distintivas protagonizadas por el juez Poretti: “A los 30 minutos del primer tiempo tira Duarte, se le escapa al arquero Muschietti la pelota mojada. Se creía que la misma había entrado, el arquero se dio vuelta rápidamente y el juez paro el juego y coloco la pelota en el sitio donde había atajado en primera instancia ante las risas generales (por supuesto no otorgo gol). Ya en el segundo tiempo concede a los 8 minutos un muy discutido gol a Pardal; empata Ochandío a los 35 minutos y a los 43 minutos sanciona con penal una aparente mano del jugador visitante Berta, tan aparente que pese al 1-1 Pardal lo tira deliberadamente afuera.”
El prestigio de Antonio Duarte llega a la escena internacional y comanda el ataque del seleccionado Norte (Capital Federal) ante el equipo escocés del ThirdLanark, anotando el único gol del partido. El equipo formo con Orio, Mazzini y Van Kamenade; Matozzi, Candido García y Célico; Heisinger, Duarte, Caldas, Anunziata y Pardal. Es decir, cuatro jugadores de Platense.
CONTINUARÁ…