Ariel Varady, flamante preparador físico del nuevo cuerpo técnico de Platense, compartió sus impresiones acerca de lo que dejó la pretemporada en Mercedes.

También comentó cuál es la idea del cuerpo técnico en cuanto al juego y lo que viene hasta el comienzo del torneo.

¿Mucho trajín después de la pretemporada?
Es cansadora la pretemporada, porque estás mañana y tarde laburando, cuando los jugadores descansan vos estás pendiente de un montón de cosas: de lo organizativo, de la logística, de la planificación, ver qué jugador está bien, quien no. Estás atento a un montón de cosas que son desgastantes.

¿O sea que no solamente son los entrenamientos sino que además tenés todo un tema de logística por atrás?
Exactamante. En ese sentido con Pedro Bocca somos obsesivos, queremos que la logística sea perfecta para que no falte nada.

Ahora que nombras a Pedro Bocca, ¿la forma de hacer la pretemporada es algo que definieron con él y con Roque Alfaro o es algo que vos propusiste y ellos aceptaron?
No, no, es un laburo en conjunto. Nosotros tratamos de trabajar todo orientado hacia la manera de jugar que propone el cuerpo técnico. Roque propone algo y con Pedro tratamos de interpretarlo lo mejor posible a través de los ejercicios tácticos, técnicos y desde la parte física.

¿Tuviste que modificar algo de lo que estabas acostumbrado a trabajar?
Uno apunta a los ejercicios físicos desde lo que se trabaja con la pelota. Desde eso es de donde se hace todo el trabajo porque es lo más interdisciplinario posible y es lo más variable posible lo que vos quieras buscar según lo táctico. Por ejemplo, al cuerpo técnico le gusta mucho plantear objetivos que tengan que ver con la tenencia de pelota, las transiciones rápidas y presionar rápido cuando se pierde la tenencia del balón. Entonces, los ejercicios físicos, más allá de los que son puramente físicos (correr, fuerza, gimnasio), después hay otro laburo físico que vos lo llevás hacia esos principios tácticos puntuales.

Tratás de que lo que vos vas a hacer en lo físico concuerde con la idea de juego del técnico…
Claro, le ponés un tiempo, una consigna colectiva con pelota y los llevás a eso. Por eso todos los días lo principal fue la pelota, qué hacemos y qué queremos respecto a eso.

Ya en Vicente López, ¿van a seguir trabajando en doble turno?
Esa es una charla que tuvimos nosotros, lo que vamos a proponer es trabajar ahora solamente en un turno pero le pedimos a los jugadores en la charla final, y entre nosotros mismos, es que la intensidad no caiga. No es que terminó acá y que ya estamos listos en lo físico de acá a Diciembre. Esto es una cuestión que tiene que seguir en el día a día, mantener las intensidades, mantener la alimentación, mantener el compromiso, mantener el profesionalismo que tiene cada uno en su vida privada para poder dar lo mejor de cada uno y que esté cada uno preparado para cada partido.

¿Cómo los viste a los jugadores físicamente? Teniendo en cuenta que es algo en lo que se tiene falencias desde hace tiempo.
Los vi muy bien. Vi que asimilaron todas las cargas de trabajo muy bien. Ayer cuando hicimos el amistoso (que para el cuerpo técnico fue una práctica de fútbol) vimos que lo que se buscó desde lo físico se está empezando a ver; esa velocidad que nosotros pedimos, esa explosión que necesitamos para ir a buscar una pelota desde la presión, esa velocidad para ir a buscar un cambio de frente o una pelota en profundidad. En ese sentido vemos que las cargas se están distribuyendo lo mejor posible. Pero todavía falta esa puesta a punto porque los jugadores todavía están duros. Lo que queremos es que no pierdan esa coordinación fina a través de las cargas de laburo, más allá de que se pierden un poco por las grandes cargas de laburo que derivan en la fatiga del jugador.

Entonces el desafío a partir de ahora es dosificar esa carga más que intensificarla…
Claro, el desafío a partir de ahora es mantener la intensidad pero ya llevada a la competencia. Que se vaya afinando la coordinación de ellos y todos los movimientos técnico-tácticos para llegar lo mejor posible al debut con Almirante Brown.

¿Sentís que esta cantidad de días alcanzó o eran necesarios más días?
Para mí fue justo. Porque también hay una realidad: la convivencia fue bárbara pero también es verdad que cada uno de nosotros somos seres humanos y tenemos nuestras familias, gente que nos está esperando. La convivencia de estos nueve días fue justa para sacar el mejor provecho de todos y poder desarrollar lo que nosotros queríamos.

¿Notaste una evolución en el trato entre los jugadores, sobre todo entre los que ya estaban en el club y los que llegaron?
Desde la convivencia fue excelente todo, desde los más grandes a los más chicos. Los más grandes siempre dando el ejemplo y los más chicos tratando de interiorizar ese mensaje. No hubo un problema con nada, estamos muy conformes con la convivencia y con el grupo que se armó y que se unió. Esto último es lo más importante ya que si el grupo está, el equipo aparece. Nosotros necesitamos todos tirar para el mismo lado y eso es lo que se está armando.

Vos como parte de un cuerpo técnico nuevo donde tenés a alguien como Bocca que conoce el club ¿cómo te sentiste?
Nosotros nos sentimos bien. Pedro es un referente en cuanto al manejo del grupo, en lo que significa él para los jugadores y para la institución. Yo ya trabajo con Pedro hace bastante tiempo y es un privilegio que tengo, y ahora tengo la oportunidad además de trabajar con Alfaro, quien tiene una idea de juego muy clara. De esta manera nosotros tratamos de convencer a los jugadores de que esa idea la interioricen y la hagan propia también y salgan a defenderla en el campo de juego y sientan que estamos jugando todos.

De los partidos en Mercedes, más allá de los resultados, ¿se pudieron obtener conclusiones válidas de lo que pretende el cuerpo técnico?
Las empezamos a ver a las conclusiones, pero todavía falta. Falta que se termine de afinar la idea, pero se empieza a mostrar con movimientos de los jugadores y con ideas tácticas que están desarrollando dentro de la cancha. El cuerpo técnico lo que busca son ideas muy puntuales: tenencia, presión y velocidad. En los cuatro o cinco amistosos que tenemos programados pensamos que se puede terminar de desarrollar la idea y así llegar al debut contra Almirante Brown lo mejor posible.

¿Cómo es la hoja de ruta de acá al comienzo del torneo?
El jueves entrenamos en Galván y el viernes tenemos el amistoso con Acassuso. Después de eso volvemos a entrenar la semana que viene y después hay que empezar a prepararse para los amistosos. La idea también es que el sábado 7 se juegue un último amistoso que sea a modo de presentación del equipo.