Contra Nueva Chicago, la historia hay que dividirla obligatoriamente. Es que en los años veinte, Platense tuvo una escisión, cuando un grupo de socios decidió alejarse de la institución y fundó el Platense 2, que compitió varios años en la segunda AFA, para llamarlo de alguna forma a la Asociación Argentina de Football.

Aquel Platense Segundo, jugaba como local en distintas canchas porteñas y coincidió con Nueva Chicago en 1922 y perdió 3-1. En los años siguientes hubo empate y triunfo del local en Mataderos, cerrándose la incursión de aquel Platense 2, en 1925, cayendo 2-0. Para esa época, Platense había pasado a llamarse Universal.

En cambio, la real historia contra Nueva Chicago se inició en 1956, cuando Platense bajó por primera vez a la vieja Primera B y el 7 de julio de ese año goleó al verdinegro en Mataderos por 3-0, con tantos de Berazza, Murúa y Gatti. En la revancha jugada en el templo de Manuela Pedraza y Crámer, fue victoria de Chicago por 4-2, con tres goles de Calandria, un gran insider del ascenso por aquellos años.

Cuando ascendió en 1964, Platense se encontró varias veces con Chicago pero lo más importante fue el 1-0 conseguido en la cancha de San Lorenzo, un caluroso 15 de diciembre y con gol de Jorge Miranda. Era el pentagonal por el segundo ascenso y el triunfo vino muy bien para seguir persiguiendo a All Boys.

Antes de llegar a la máxima categoría, Chicago intervino en el torneo Reclasificación con la intención de llegar a la A, pero perdió los dos partidos con Platense, 1-0 en Núñez y 2-1 en Mataderos.

En la Primera A se encontraron recién en 1982 y en 1983. Fueron tres victorias del Marrón y una sola de Chicago. El primer choque en Vicente López lo ganó Platense por 2-1, con dos tantos de Eduardo Anzarda, descontando Mario Franceschini.

Platense lleva once partidos consecutivos sin ganarle a Nueva Chicago. La última vez ocurrió en Mataderos, el 10 de octubre de 1999, gracias a un gol de Julio Zamora. Luego hubo ocho empates y tres éxitos de Chicago. En Vicente López, para un triunfo Calamar hay que remitirse al 10 de noviembre de 1983, con un 2-0 producto de los tantos que señalaron Ricardo Aniceto Roldán y Eduardo Hernández.

El historial, por lo tanto, está más apretado que nunca. Será el partido 50, con 15 triunfos de Platense, 14 de Chicago y 20 empates. Chicago hizo más goles que Platense: 60 contra 57.